lunes, 10 de febrero de 2014

Plomo en los bolsillos

Mi amigo Nacho es un valiente. Pudiérase decir que de momento es un inconsciente y que hasta que no lleve a buen término el reto que se ha propuesto no cruzará la delgada línea que separa a los valientes de los inconscientes. Sin embargo yo prefiero desde un principio considerar que es un valiente por dos motivos. El primero es símplemente el mero hecho de haberse propuesto realizar semejante aventura. Sólamente eso implica una ardua preparación física y mental hasta llegar al gran día para la que muchos no estamos preparados y es para quitarse el sombrero. Y en segundo lugar, estoy convencido de que lo conseguirá. A lo mejor no cae este año por diversas circunstancias, pero antes o después conseguirá el objetivo. Estoy seguro.

El reto no es otro que realizar la brevet Luchón-Bayona en junio de este año. Para quien no lo sepa una brevet es como una marcha cicloturista pero con la particularidad de que puede realizarse en varias etapas. O dicho de otro modo, se dispone de un par de días para completarla pudiendo parar a dormir... o no. Esta particularidad se debe a las características de la marcha. Por si alguien no ha caído en la cuenta de la distancia que separa a estas dos ciudades francesas, el paseo es largo. Sin ir más lejos se trata de 326 km cruzando además los puertos más terribles del Pirineo central, esto es, Peyresourde, Aspin, Tourmalet, Aubisque y Soulor. Cinco monumentos del Ciclismo.

Imagino que las motivaciones que han empujado a Nachete a realizar esta prueba serán diversas pero entre ellas figura una lectura que le terminó de envenenar. Esta no es otra que Plomo en los bolsillos, una recopilación de (tal y como cita la portada) malandanzas, fanfarronadas, traiciones, alegrías, hazañas y sorpresas del Tour de Francia escrita por Ander Izagirre. Un chico que aparcó su sueño de ser ciclista gracias a una gloriosa frase que le soltó una espectadora cuando este marchaba descolgado del pelotón en una carrera de juveniles. Dirigiéndose a su hijo y refiréndose a Ander dijo algo así como "para ir como este, tú no te hagas ciclista...". Algo que todos los que hemos sido, somos y seremos unos simulacro de deportistas mediocres hemos tenido que escuchar a lo largo de nuestra vida. Si gracias a esa frase perdimos un ciclista mediocre pero ganamos a un buen escritor, demos gracias a esa señora. 

En este libro se narra por ejemplo como se parió la primera gran etapa de montaña pirenaica en el año 1910, una auténtica mezcla de épica, aventura y pillería por parte de los organizadores. Las pistas que ascendían a los puertos de Aubisque y Tourmalet no eran casi transitables ni caminando. No digamos ya en bici o en los escasos coches de aquella época. Sin embargo trampeando por aquí y por allá consiguieron engañar a unos cuantos locos para que pasaran a la Historia del Deporte cruzando aquellos míticos puertos. Eso sí, en la línea de salida los organizadores tuvieron que advertir a los ciclistas de que "tuvieran cuidado con los osos" y en la línea de meta tuvieron que soportar los insultos e imprecaciones que los sufridos ciclistas les proferían. Octave Lapize, el ganador de esa primera grandiosa etapa, cruzó el último puerto de la jornada en tercera posición derrengado. Tiró la bici a la cuneta y soltó a los organizadores una sentencia que quedó para la Historia: "Asesinos".

..."et autres gros animaux errent en liberté". 
Traducido al castellano, "ojo cuidao con los OSOS"
Salida de la prueba, 3:30h de la madrugada... eran otros tiempos... eran héroes

Más tarde, en esa etapa que habiendo salido de Luchón y cruzado cinco monstruos de puertos, Lapize pedaleó como un poseso durante casi 180 km para alcanzar a los escapados y batirlos al sprint en Bayona. El veneno caló en la gente y así hasta ahora. El Tour de Francia, la más bella carrera del más bello y épico deporte. Porque el Atletismo es el rey de los deportes, el Fútbol es un espectáculo que trasciende a lo estríctamente deportivo pero el Ciclismo... el Ciclismo es otra cosa y la gente que lleva el veneno dentro desde tierna edad sabe a qué me refiero. Nunca jamás olvidaré a Torres, el dueño del taller de bicicletas más mítico de mi infancia, corriendo al lado de Perico en las rampas de Saint Lary Soulan. Perico no iba ni entre los veinte primeros pero a Torres se le saltaban las lágrimas como un crío de la emoción. Eso es el Ciclismo.

Pues bien, Nacho influido por las hazañas de Lapize en esa etapa de Luchón-Bayona decidió liarse la manta a la cabeza y preparar tan imponente cita para este verano. Mientras explica sus evoluciones, aventuras y desventuras en su blog algunos incautos le acompañamos lo mejor que podemos en sus entrenamientos. De momento a nadar, algún día tocará coger la bici, y sobre todo a lifarear que como ya dije en su día, una buena alimentación e hidratación es esencial. Entre largo y largo y cerveza y cerveza van surgiendo conversaciones acerca del anteriormente mencionado libro y este sábado me lo prestó.

A mí me gusta mucho leer. De hecho puedo tener temporadas de auténtico devorador de libros. El año pasado salí a libro semanal más o menos. Y puedo engarzar varios libros de una misma temática de una tacada. El año pasado por ejemplo tocó las tres primeras partes de Odisea en el Espacio de Arthur C. Clarke, Contact de Sagan, Solaris de Stanislaw Lem... libros enfocados a las inmensidades del espacio y sus remotos mundos posíblemente habitados por formas de vida inimaginables.

Este año parece que ha empezado en plan hazañas deportivas. Después de leer un libro sobre la expedición noruega al Polo Norte en 1893 tenía preparada una biografía de Emil Zatopek. Pero Plomo en los bolsillos llegó a mis manos y no pude resistirme. Y me está encantando. De hecho creo que lo voy a comprar aunque ya lo haya leído. Porque es de esas lecturas que se pueden repasar una y mil veces y repleta de datos que para frikis como yo son interesantísimos y que mucha gente encontrará de lo más intrascendente.

Con las aventuras de Lapize, Coppi y Bartali rondando por la cabeza ayer cogí la bici de montaña ya que la de la carretera la encontré de nuevo con una rueda pinchada y van... La llevaré al taller a que le echen un ojo ya que no es normal haber pinchado en cosa de doce meses pues... perdí la cuenta... ¿siete veces? Por ahí andará la cosa. Este año ya llevo una, las iré contando. Como digo cogí la BTT y a diferencia del magistral escalador francés Rovic que se ponía plomo en los bolsillos para descender los puertos ya que era pequeñito y ligero y necesitaba un extra en las bajadas, yo llevaba plomo en las piernas.

Hacía tiempo, mucho tiempo, que no tenía que recurrir al piñón más grande para subir el camino Barraón. Me lo tomé con calma, pero pude constatar que las piernas estaban pesadas y mucho. Como después de ir al Ariño y volver por la Boquera iba bien de hora marché hacia el Pueyo con más plomo en las piernas, en los bolsillos y hasta en salva sea la parte. Subí muy chino chano pero llegué hasta la placeta el Sol bien de fuelle pero con una inquietante pesadez de piernas.

Y hoy que me han engañado para ir a correr cuando quería haber ido a nadar, de nuevo las piernas como planchas de plomo dando vueltas por el vórtice infernal de caminos laberínticos de la Virgen del Plano con unas aireras infernales. Casí hacían falta los plomos para no salir volando. Al menos esta vez, con Jesús, no nos hemos perdido. 

A ver si pasa febrero con sus lluvias y sus aireras y llegan los calores para que las piernas se desentablonen y tiremos los plomos de los bolsillos (el lastre, que no el libro). Aunque me temo que pinta una primavera igual de fastidiada que el año pasado...

2 comentarios:

  1. ¡Muchas gracias por tus palabras de ánimo!. Me voy a ruborizar... Ciértamente es un libro muy ameno. Por la pesadez de piernas no te preocupes, cuando salgas más en bici las piernas se te pondrán a tono en seguida. ¡Y ánimo a ti también compañero!.

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    1. ¡Bai! ya te ruborizarás cuando lleves ciento y pico kilómetros en la Pax Avant, jejeje!
      Sí, libro muy ameno aunque el penúltimo capítulo sobre Armstrong me dejó un regusto amargo

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